Comunicado AUNG SAN SUU KYI Y MYANMAR (BIRMANIA)
Birmania, desde 1962, momento en el que el ejército se hace con el poder e instaura un Gobierno de Junta Militar, se configura como uno de los países en los que las restricciones de las libertades y derechos humanos, civiles y políticos, se hacen mas patentes.
Este régimen hoy, se caracteriza, entre otras cosas, por tener el mayor porcentaje de soldados por habitante de esta región asiática, un ejército compuesto por 70.000 menores de 18 años, por mantener más de 1 millar de presos políticos y por haber generado un millón de refugiados.
El único partido de la oposición, la Liga Nacional para la Democracia (LND)ganó legítimamente las elecciones en 1990, convocadas tras intensas movilizaciones de protesta por parte de la población civil. Un golpe de estado impidió la constitución de este Gobierno. Este proceso conduce a la constitución de un gobierno en el exilio por parte de los diputados de la LND y el arresto domiciliario desde entonces de Aung San Suu Kyi, como presidenta del partido y símbolo de la oposición.
De nuevo recientemente, la población civil lidera manifestaciones pacíficas de protesta, las mayores de las dos últimas décadas, acompañadas por la presencia de monjes budistas, con el resultado de un endurecimiento de la represión, mayores restricciones en derechos civiles, numerosas personas muertas, y cientos de heridos y detenidos.
Mientras los organismos internacionales recurren a unos sistemas de sanciones a todas luces inoperantes y se niegan a condenar explícitamente el régimen militar.
El apoyo de grandes potencias asiáticas que se benefician de sus materias primas, así como de la venta de material bélico es la clave para comprender la ausencia de esta condena.
MUJERES DE NEGRO CONTRA LA GUERRA DE MADRID pedimos:
A los organismos internacionales:
La condena firme hacia la Junta Militar.
A las autoridades militares birmanas:
El cese de la violencia contra la población civil birmana.
El abandono del poder y el respeto a la voluntad de la ciudadanía, expresada en las elecciones de 1990 que Aung San Suu Kyi ganó.
La Liberación inmediata e incondicional de Aung San Suu Kyi, la líder de la oposición, de su arresto domiciliario.
Expulsemos la guerra de la historia y de nuestras vidas.
Madrid a 28 de octubre del 2007