El último domingo de mes
En la Plaza Mayor (junto al caballo), a las 12 horas
Mujeres de Negro,
Invita
a una concentración de negro y en silencio.
EL 22 DE FEBRERO DEL 2009
Mujeres de Negro contra la guerra – de Madrid
Manifestamos nuestro rechazo:
A todos los fundamentalismos religiosos, políticos, económicos, y estamos en contra de todo tipo de discriminación por raza, etnia, nacionalidad o género.
De la misma forma:
Siempre valoraremos a las personas que desean que su fe o creencia religiosa sirva para reconocer y acercarse a l@s otr@s, para oponerse a las guerras, para hacer un mundo mas humano.
Expulsemos la guerra y la violencia
de la historia
y de nuestras vidas.
C/ San Cosme y San Damián, Nº 24, 2º
28012 – Madrid
COMUNICADO
RECHAZAMOS TODOS LOS FUNDAMENTALISMOS
Mujeres de Negro de Madrid rechaza los fundamentalismos religiosos, políticos, económicos, y está en contra de todo tipo de discriminación por raza, etnia, nacionalidad o género.
El fundamentalismo es una forma de exclusión por parte de la clase dominante, tratando de imponer lo que se debe hacer, ser o decir en lo religioso, político, económico o incluso en lo personal. En muchos casos, el fundamentalismo religioso viene atado a la interpretación de una Sagrada Escritura presentándola como infalible, atemporal y universalmente válida.
Acostumbramos a creer que los fundamentalistas son los otros, pero la Historia nos demuestra que existen en todas las religiones. Por nuestra parte, nos toca denunciar el propio de la sociedad en que vivimos, el fundamentalismo católico.
En España, la parte más reaccionaria de la Iglesia Católica ha hecho durante mucho tiempo que la religión dirigiera y condicionara nuestra sociedad y nuestra vida personal. Es un poder que desean seguir teniendo y no se resignan a perder, de ahí su rechazo a una sociedad fundamentalmente laica.
El fundamentalismo católico se ha caracterizado por ideas muy conservadoras y contrarias al divorcio, al sexo no matrimonial, los anticonceptivos, el derecho al aborto, las relaciones homosexuales y bisexuales, la transexualidad, entre otras cuestiones. También nos preguntamos y nos gustaría que se reflexionara si realmente La Iglesia ha apoyado al débil, al diferente ideológica o sexualmente, o se ha opuesto a las guerras. Una omisión que ha alimentado la pervivencia de la discriminación y la violencia. Más aún, la historia de nuestro mundo ha girado demasiadas veces en torno a guerras de religiones.
Las Mujeres padecemos los fundamentalismos religiosos porque el catolicismo nos ha querido imponer un estereotipo de comportamiento femenino sumiso, discreto, de inferioridad ante el hombre. Eso quiere decir que debemos ceñirnos a una existencia invisible y colaboradora con el patriarcado existente. En España, aunque se predica como un Estado Moderno, sin embargo existen aún convenios con la Iglesia Católica, y se permite que se ejerza un poder ideológico sobre la educación, que es elemento básico para erradicar ese tipo de valores del patriarcado.
Pero también somos fundamentalistas cuando en nuestro entorno cercano no respetamos las diferencias de pensamiento, credo, raza; se manifiesta en nuestras actitudes xenófobas.
Siempre valoraremos a las personas que desean que su fe o creencia religiosa sirva para reconocer y acercarse a l@s otr@s, para oponerse a las guerras, para hacer un mundo mas humano.
Invitamos a reflexionar sobre todos los fundamentalismos y a poner nuestro grano de arena rechazando este tipo de actitudes.
CONVOCATION OF WOMEN IN BLACK OF MADRID
The last Sunday of the month
In the Plaza Mayor (next to the horse statue), at 12:00
Women in Black
Invite you to a vigil in black and in silence.
22 FEBRUARY 2009
Women in Black against war – Madrid
Declare our rejection:
Of all fundamentalisms — religious, political, economic — and we are against all kinds of discrimination, be it because of race, ethnicity, nationality or gender.
Likewise:
We will always value people who desire that their faith or religious belief serve to acknowledge and draw near to others, to oppose war, to create a more humane world.
Let us expel war and violence
from history
and from our lives.
COMMUNIQUE
WE REJECT ALL FUNDAMENTALISMS
Women in Black of Madrid reject religious, political and economic fundamentalisms and is against all types of discrimination, be it because of race, ethnicity, nationality or gender.
Fundamentalism is a form of exclusion on the part of the dominant class, which tries to impose what one must do, be or say in the areas of religion, politics, economy and even with regard to personal matters. In many cases, religious fundamentalism is tied to an interpretation of some Sacred Scriptures, presenting them as infallible, timeless and universally valid.
We are accustomed to thinking of fundamentalists as the others, but history shows us that they exist in all religions. As for us, it is up to us to denounce the fundamentalism of the society in which we live, that being Catholic fundamentalism.
In Spain, the most reactionary part of the Catholic Church has for many years caused religion to condition and direct our society and our personal lives. It is a power that they wish to continue having and which they do not resign themselves to losing, and this is their reason for rejecting a fundamentally lay society.
Catholic fundamentalism is characterized by very conservative ideas — against divorce, extra-marital sexual relations, contraceptives, the right to abortion, homosexual and bisexual relations, and trans-sexuality, among other issues. We also ask ourselves and would like people to consider if The Church has really given support to the weak, to those who are ideologically or sexually different, or has opposed war. This is a failure that has fed the persistence of discrimination and violence. What is more, the history of our world has revolved all too often around religious wars.
We women suffer from religious fundamentalism because Catholicism has wanted to impose upon us a stereotype for feminine behavior, submissive, discreet and cautious, inferior to men. That means that we should adapt and tie ourselves to an invisible existence collaborating with the existing patriarchy. In Spain, although it praises itself as a Modern State, there still exist certain agreements with the Catholic Church, and the Church is permitted to exercise ideological power over education, which is the basic structure where one could eradicate such values of the patriarchy.
But we are also fundamentalist when we do not respect the differences of thought, belief and race of those around us, as manifested in our xenophobia.
We will always value the persons who want that their faith or religious belief serve to acknowledge and draw near to others, to oppose war, to create a more humane world.
We invite you to reflect on fundamentalisms, including in your considerations our few thoughts rejecting these sorts of attitudes.